Gustavo Bermúdez pasó por Vuelta y Media y habló sorbe su regreso al teatro en «La cena de los tontos» después de 30 años: «Me costó mucho tomar la decisión. Me daba miedo tener el compromiso de ir todos los días al teatro después de tantos años, pero laverdad es que estoy feliz».
«Soy muy un defensor de la tele abierta. Creo que en algún momento va a volver a ser la estrella».
«Se fueron terminando las figuras. Creo que la industria trabajó para tener figuas, y después dejó de hacerlo. Muchas de las empresas de ficción las manejan contadores que no saben nada».
«Nunca tuve representante. Soy bravo, aprendí del hambre».
Sobre la popularidad y el ego, afirmó: «La pelea se la di siempre y la gané».
«Siempre tuve la idea de parar joven. Cuando nació mi segunda hija tuve bastante suerte como para seguir. Fui haciendo algunas cosas muy esporádicas».
«Mi hija más chica tuvo un rotavirus a los seis meses. La doctora nos dijo que no se podía hacer nada. (…) Por más ateo que seas, hay un momento que mirás al cielo y decís ‘Dios, ponete la diez'».