Moria Casán visitó Vuelta y Media y habló de todo: parejas, su hija, el teatro, la cárcel, traumas, reflexiones y más.
«Lo único que no había hecho era tele a la mañana. Me llamó Pablo Codevilla para hacerme la propuesta. Le dije que si no era diaria, no aceptaba».
«Nunca tuve drama en mostrar mi cuerpo. Es pura actitud. Me empecé a construir de chiquita. Soy una gran hermitaña».
«Nunca hice un casting en donde me dijeron que no, siempre me eligieron y fui figura».
«Yo quería que nadie me comiera la energía».
«Considero que el hombre ha sido necesario en mi vida, aunque me he equivocado muchísimo. Tengo poco registro de esa culpa, pero me encantan los hombres. Soy hombreriega».
Sobre su experiencia en la cárcel en Paraguay: «Nunca estuve triste ni tuve miedo. Estuve nueve días, fui a una especie de monasterio, no era una cárcel. No era agradable, pero al lado de una cárcel era un spa. Lo bueno fue lo que se armó con las chicas que estaban ahí, nos hicimos amigas».
«Tengo muy pocas amigas».
Sobre su relación con Sofía Gala, su hija, confesó: «Me cuesta ser amiga de Sofía. Le tengo un respeto reverencial, le tengo miedo. Es una mujer muy especial».
«La serie sobre mi vida va a ser épica».