A más de 33 años de la primera celebración del festival, la ciudad estadounidense festeja y sigue manteniendo su espíritu. Aquel fuego que encendió la Generación Z, en 1991, se mantuvo edición tras edición. Así es como del 1° al 4 de agosto, los centennials escribirán una nueva página en la historia del festival. Con Megan Thee Stallion, Hozier, Sza, Stray Kids, The Killers, Future X Metro Boomin, Blink-182, Melanie Martínez y Skrillex como headliners, el megafestival promete convertirse en una fiesta para miles de fans.
De esta manera, la edición de 2024 reunirá géneros como el rock, R&B, hip-hop, indie rock, electrónica y hasta K-pop. El jueves 1°, Megan Thee Stallion será la primera headliner. La rapera fue uno de los últimos anuncios del festival luego de que Tyler, the Creator, canceló su participación un mes atrás. Ese mismo día se presentará Hozier —que también fue parte de Lollapalooza Argentina— el autor del hit “Take Me To Church”. En sus videoclips, el irlandés cuenta con la participación de actores y actrices de primera línea como Domnhall Gleeson, Saoirse Ronan, Natalie Dormer y Anya Taylor-Joy, protagonista de la exitosa miniserie Gambito de dama.
El festival seguirá el viernes con SZA, la cantante de R&B que deslumbró con su voz en las últimas ediciones. Incluso, en su paso por Argentina, mostró su cariño por el país alzando una bandera celeste y blanca en su show. Esa misma noche pisará el escenario Stray Kids. La banda de K-pop es uno de los grupos masculinos con mayor proyección global y consiguió múltiples nominaciones y diversos premios internacionales.
El sábado dirá presente The Killers, el grupo liderado por Brandon Flowers. A su término llegará el dúo de Future y Metro Boomin. Los artistas volvieron a juntarse para sacudir el mundo del trap con su proyecto conjunto We don’t trust you.
El domingo 4, el cierre del festival estará a cargo de Melanie Martínez. Desde 2023, la exparticipante de The Voice decidió arriesgarse con su música dark pop con toques satíricos y emocionales. Ese año, la artista sorprendió con una serie de shows performáticos donde se disfrazaba de una criatura de piel rosada y cuatro ojos, que se parecía a un hada. Ese mismo día, Blink-182 volverá con sus hits. Mark Hoppus, Tom DeLonge y Travis Barker harán enloquecer a los fans con la nostalgia punk como bandera.
A unos metros del lago, el Lollapalooza Chicago representa una experiencia única, una mezcla entre la naturaleza del parque, la modernidad de la ciudad y la pasión por la música. En cada extremo de Grant Park se ubican los dos escenarios principales, el T-Mobile y el Bud Light. El resto del parque se encuentra rodeado por el centro de Chicago. En un intento por describir el lugar, los fans usan la palabra “colosal”. Es que el predio es 85 hectáreas más grande que la Ciudad del Vaticano.
Detrás de los escenarios se elevan los rascacielos de una de las ciudades más importantes de Estados Unidos. En ese sentido, en la edición de 2023, uno de los edificios más llamativos iluminó sus ventanas con diversos colores para deletrear la frase “Stay safe Lolla”. Se trató de un mensaje que buscaba recordarles a los miles de asistentes que se cuidaran mientras disfrutaban la experiencia.
Además de los headliners, el festival contará con actuaciones de artistas como Two Door Cinema Club, Victoria Monét, Deftones, Faye Webster, Yoasobi, Kesha, Four Tet, Vince Staples, Tyla, Kenny Beats, Raye, Tate McRae, Friko, Geese, Romy, Veeze, Been Stellar, Nia Archives, Militarie Gun, Blondshell, entre otros, incluyendo la colaboración especial de Laufey con la Filarmónica de Chicago.
A casi 9.110 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires —que cuenta los meses para festejar los 10 años de Lollapalooza Argentina— la ciudad ultima detalles para dar rienda suelta a su vigésima edición.
La unión entre el “Lolla” y Chicago comenzó hace casi 20 años, cuando el espectáculo arribó al Grant Park allá por 2005. En aquella primera edición el line up estuvo conformado por Kasabian, Arcade Fire, The Killers, Liz Phair, Cake, Primus, Kaiser Chiefs y Weezer. A partir de entonces, Chicago se convirtió en ciudad madre del festival después de años de haber mantenido una modalidad itinerante.
La historia empezó en 1991, cuando Perry Farrell buscaba hacer una gira por Estados Unidos para despedirse de su banda Jane’s Addiction. La primera parada, el lugar donde nació Lollapalooza, fue en Phoenix, Arizona. Semanas después culminó en Seattle.
Años más tarde, en 2003, Farrell retomó el festival, sin embargo, la idea de salir de gira no era rentable por distintos motivos, entre ellos, los costos para montar grandes escenarios en distintas ciudades, los altos cachets y la fluctuante respuesta del público en cada lugar. Como solución, Perry pensó en una sede, Auburn Hills en Michigan.
A partir de 2005, el festival buscó reinventarse. Fue un año bisagra en el que uno de los cambios fue el paso al formato anual. Así, Lollapalooza sembró su semilla en la ciudad, dando paso a un vínculo que convirtió a Chicago en la sede de este fenómeno musical de dimensión mundial.