Diego Díaz visitó Todo Pasa para recordar anécdotas de su vida como futbolista y hablar de la relación con su mamá, su amistad con Diego Latorre y el impacto de la fama en su vida.
«Me anoté en la universidad solo para que mi vieja se quedara tranquila». «Me anoté en Ciencias de la Comunicación sin saber qué era (…). Hice primer año durante cuatro años. Iba pura y exclusivamente para que mi vieja viera que no largaba los estudios».
«Te mentiría si te diría que me quedó algo de ahí. Tengo una cultura media de mi familia docente, pero mi biblia fue el gráfico».
«Antes de llegar a Videomatch, me rebotaban en los boliches. Después de eso, me hacían pasar como si fuera Mel Gibson. (…) En los picos de popularidad, la mirada del otro cambia completamente sobre vos».
«Mi vida nunca tuvo descontrol».
«Tuve 10 hijos. Los 10 goles que hice en primera son mis 10 hijos. No sé si el momento de la salida de un hijo es mucho más fuerte que esos goles».
«Yo sé que la descripción parece de la caída del Imperio Romano. Salí de la cancha en andas, cuando la gente me decía ‘¿para qué entra este pendejo a la cancha?'».