Gabriel Rolón vino a Perros de la Calle a reflexionar sobre los duelos de las pequeñas decepciones, las separaciones, el deseo y los fantasmas: «El trabajo del duelo es matar un fantasma para crear un recuerdo» (…) «El recuerdo de un momento hermoso tiene algo de tristeza». «Cuando un deseo muere, hay que registrarlo como una muerte», agregó. «¿Por qué una separación te va a convertir en una mala persona?», se preguntó.
«Cuando uno sabe quién es, está más cerca de saber qué deseas (…) Si conocés quién sos, conocés tus límites, dijo Rolón.»La certeza es una facultad de las personas que no están bien de la cabeza. La duda es parte constitutiva de todo ser humano».